Hacer del videojuego una profesión: una buena opción de futuro

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  • El sector tecnológico de Cataluña y especialmente la industria del videojuego se encuentran en expansión a pesar de la pandemia. La falta de profesionales, sin embargo, amenaza de ralentizar su crecimiento
  • El grado en Ingeniería Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos proporciona al sector profesionales todoterreno capaces de especializarse en un mundo tecnológico cambiante

El sector tecnológico de Cataluña se encuentra en una clara tendencia ascendente a pesar de la crisis pandémica. El último «Barómetro del sector tecnológico 2020» publicado por el Círculo Tecnológico de Cataluña, ponía de manifiesto que las industrias TIC del ámbito catalán alcanzaron el año pasado cifras de récord. Sin ir más lejos, en el año 2019 había registradas 16.339 empresas del sector tecnológico –cifra hasta ahora nunca vista–, un 72% de las cuales cerraron el año con beneficios y con resultados positivos superiores al 5% en muchos de los casos. Con más de 124.100 puestos de trabajo registrados el año pasado, se puede decir que el sector TIC ya crea más trabajo que el sector del automóvil en Cataluña.

Sin embargo, el principal reto que ahora amenaza el crecimiento del sector no es otro que la necesidad de captar talento suficiente para cubrir los puestos de trabajo que el mercado genera, lo que puede suponer un buen dolor de cabeza para las empresas en expansión.

Ser un todoterreno para moverse en un entorno tecnológico cambiante

En el año 2012 se implantaba en la UVic-UCC el grado en Ingeniería en Multimedia para dar respuesta a una demanda laboral creciente, que entonces ya se intuía que venía para quedarse. El curso 2017-18 el grado se reconvertía en Ingeniería Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos, con el objetivo de ofrecer una especialización en estos dos ámbitos crecientes en Cataluña, y «con la voluntad de formar profesionales expertos en la creación de productos digitales, con habilidades creativas y técnicas para el diseño de contenidos interactivos, gráficos y audiovisuales», según explica Sergi Grau, decano de la Facultad de Ciencias y Tecnología.

Cuando terminan el grado los estudiantes deben ser auténticos todoterreno, capaces de desarrollarse en un contexto cambiante

La adaptación del nuevo plan de estudios hacía hincapié en una formación integral con prácticas en las empresas, que permitiera a los estudiantes aprender a través del trabajo en equipo, la comunicación, la planificación y, sobre todo, la creatividad como rasgo diferencial. «Hay que tener presente que el mundo de la tecnología cambia muy rápidamente y que, cuando terminan el grado, los estudiantes deben ser auténticos todoterreno, capaces de desarrollarse en un contexto cambiante», explica el decano. Por ello el grado ofrece formación en tres ámbitos de conocimiento –el diseño gráfico, el desarrollo y la experiencia de usuario– que les permitirán especializarse posteriormente en cualquiera de los perfiles altamente cualificados que ofrece el sector.

Sabías que ...

Los graduados en Ingeniería Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos de la UVic-UCC...

  • tienen una empleabilidad del 100%
  • tienen una empleabilidad antes de los 6 meses posteriores a la finalización de los estudios del 100%
  • obtienen un 100% de contratos fijos
  • tienen un salario medio de 2.250 euros mensuales

* Según el estudio sobre inserción laboral de AQU Catalunya del año 2020 basado en estudiantes que terminaron el grado en 2016.

El videojuego, una profesión seria

De una década a esta parte, el videojuego ha dejado de ser un entretenimiento de los jóvenes para convertirse en un fenómeno global de primer orden. De hecho, dentro del conjunto de la industria cultural y creativa es el sector que más ha crecido, con diferencia, en los últimos años y ha sido una de las (pocas) industrias que han salido beneficiadas de la pandemia, ya que se estima que con el confinamiento el consumo de videojuegos ha aumentado alrededor de un 20%.

Desde la Consejería de Políticas Digitales de la Generalidad de Cataluña se está apostando fuertemente por convertir Barcelona y Cataluña en un polo de atracción de la industria del videojuego. Actualmente el conjunto de empresas catalanas productoras de videojuegos ya aportan el 53% de la facturación anual del sector en España, según indica el Libro blanco de la industria catalana del videojuego 2019. «Este ecosistema creado con el apoyo del Administración ha permitido que muchas empresas internacionales tengan sede en Barcelona y que muchas otras pequeñas empresas independientes encuentren en Cataluña el terreno abonado para desarrollarse», afirma Grau.

Mucho más que un entretenimiento

Pero no todos los videojuegos deben asociarse necesariamente al ocio. Existe una demanda creciente por parte de sectores como la formación, la medicina o la cultura que cada vez más se sirven del videojuego para ofrecer productos más atractivos e interactivos. «Los serious games permiten hacer más fáciles, comprensibles y divertidos, procesos que de por sí podrían ser complejos o aburridos» explica Grau, lo que hace que tengan una aplicabilidad infinita. Desde simular una operación quirúrgica para mejorar una técnica médica, hasta desarrollar el curso de riesgos laborales de una empresa, pasando por una visita de realidad virtual a un museo... todo es susceptible de ser tratado a través de un videojuego.

La formación, la medicina o la cultura se sirven cada vez más del videojuego para ofrecer productos más atractivos e interactivos

En este sentido, ya hace cuatro años que estudiantes del grado en Ingeniería Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos hacen un proyecto de colaboración con estudiantes del grado en Terapia Ocupacional para trabajar conjuntamente en el desarrollo de un proyecto sobre tecnologías aplicadas a la salud. Según Grau, «es un proyecto de innovación docente en el que estudiantes de dos disciplinas trabajan conjuntamente, aportando cada sus conocimientos para sacar adelante un proyecto tecnológico, en este caso sobre salud, tal como se encontrarían en el mercado laboral».

Jonathan Gómez, la experiencia de crear videojuegos serios

Jonathan Gómez está a punto de terminar los estudios del grado en Ingeniería Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos. En estos momentos compagina la elaboración del trabajo de fin de grado (TFG) en el que está diseñando un videojuego de entretenimiento con las prácticas curriculares dentro de la empresa Neurekalab, que se dedica a crear herramientas tecnológicas para mejorar el aprendizaje y reducir el fracaso escolar.

«A pesar de que cuando empecé los estudios estaba convencido de querer dedicarme a los videojuegos del entretenimiento, ahora me inclino más por los juegos serios porque me atrae el hecho de poder ayudar a otras personas a mejorar su calidad de vida», afirma. En Neurekalab se dedica a diseñar una nueva interfaz para la empresa y a diseñar juegos para ayudar niños que tienen TDAH y discalculia. Lo que más le ha gustado de los estudios de Multimedia «es que me han enseñado todo el proceso de creación, desde diseñar una interfaz o un personaje y programarlo, hasta publicitarlo. Este conocimiento de todo el proceso hace que ahora, cuando diseñe, me pueda entender mejor con todos los agentes que intervienen en un proyecto multimedia».

Sharingful, el proyecto de emprendimiento de Guillem Vestit y Gerard Garrote

Sharingful es el proyecto que acaban de sacar al mercado dos ex estudiantes del grado en Ingeniería Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos, fruto de su trabajo de fin de grado. Se trata de una aplicación web que permite agrupar usuarios para compartir los contenidos y gastos de las plataformas digitales. «Nos dimos cuenta de que por Internet mucha gente buscaba personas con las que compartir el gasto de las plataformas digitales, y eso nos hizo ver que había una oportunidad de negocio», afirma Guillem Vestit, emprendedor del proyecto junto con Gerard Garrote.

Para poder sacar adelante el proyecto empresarial se ayudaron de la modalidad TFG Innova, que impulsa la Unidad de Emprendimiento de la UVic, y que da formación a los estudiantes que hacen trabajos de fin de grado con la idea de crear su propia empresa. Afirman que su objetivo es «dedicarnos profesionalmente a esto, porque vemos que hay un mercado potencial muy grande y no descartamos abrirlo al resto de Europa».

De su paso por el grado en Ingeniería Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos, destacan la formación en diseño «que es una parte muy interesante que no te ofrecen otros estudios relacionados con la informática».

Laura Martínez, experta en experiencia de usuario en Qatar

Laura Martínez Casas es graduada en Ingeniera Multimedia. Aplicaciones y Videojuegos y en estos momentos trabaja para una startup del sector médico, Rimads, que forma parte del proyecto de Qatar Foundation. Lidera la parte de experiencia de usuario, es decir, como la gente interactuamos con las interfaces digitales y la tecnología. «Actualmente estamos desarrollando una inteligencia artificial, Avey, para facilitar el acceso a un diagnóstico médico. La idea es que cualquier persona, desde cualquier lugar del mundo, pueda tener acceso a un diagnóstico médico preciso de forma gratuita».

De los estudios del grado destaca la versatilidad, ya que toca todas las teclas, y eso le ha permitido tener una visión amplia de todas las áreas relacionadas con el sector digital. «Una vez estás en el mundo profesional te das cuenta de la importancia que tiene haber adquirido esta visión transversal, ya que te da herramientas para detectar las necesidades y limitaciones que pueden aparecer cuando desarrollas un proyecto», afirma, mientras asegura que sus perspectivas de futuro se orientan a «trabajar por una sociedad más justa e igualitaria». También está convencida de que «la tecnología es una herramienta muy potente, y confío en que si se enfoca en la dirección correcta nos puede ayudar a construir un mundo más inclusivo».

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