- Los estudios de Educación de la Facultad de Ciencias Sociales de Manresa han hecho una apuesta decidida por impulsar la competencia lectora de las futuras maestras con actividades diversas y transversales
- Por primera vez, las estudiantes del grado en Maestro de Educación Infantil de UManresa han participado en el proyecto Atrapallibres, acompañando a niños y niñas en la lectura
- En el marco de las acciones para promover la competencia lectora, UManresa reunió a un centenar de personas en las Jornadas de Educación “El poder transformador de la lectura: el valor de la literatura infantil y juvenil”
La última edición del informe PISA puso sobre la mesa datos preocupantes en cuanto a las competencias de los estudiantes catalanes en matemáticas, ciencias y comprensión lectora. Precisamente, la lectura es una de las más débiles entre el estudiantado catalán. Una realidad sobre la que ya había alertado otro estudio, el PIRLS, que situaba a Cataluña en la cola de la comprensión lectora de todo el Estado español. La Facultad de Ciencias Sociales de Manresa, desde su responsabilidad como formadora de futuros maestros y maestras, ha apostado fuerte este curso para contribuir a dar la vuelta a esta situación.
Leer es mucho más que decodificar
«La competencia lectora es básica en cualquier ámbito de nuestra sociedad y, muy especialmente, en el mundo de la educación», afirma Montserrat Pedreira, directora del grado en Maestro de Educación Infantil, que añade que «comprender lo que se lee quiere decir entender, significa inferir, significa ser crítico, significa imaginar, en definitiva, mucho más que limitarse a la descodificación». Es con este convencimiento que el grado en Maestro de Educación Infantil ha impulsado una serie de acciones con el objetivo de mejorar esta habilidad tan necesaria «porque como maestros, profesionales con inquietud intelectual y con compromiso con la sociedad, deben trabajar el pensamiento crítico y esto requiere competencia lectora. Pero, por otra parte, será responsabilidad de los futuros maestros, lograr que toda la ciudadanía disfrute del placer de comprender lo que se lee para promover la lectura como fuente de conocimiento a lo largo de la vida».
«Comprender lo que se lee significa entender, significa inferir, significa ser crítico, significa imaginar, en definitiva, mucho más que limitarse a la descodificación»
En el grado en Maestro de Educación Infantil hace años que se trabaja con el objetivo de mejorar la competencia lectora de los futuros maestros y de acompañarlos en el placer de la lectura. En este curso, esta cuestión se ha priorizado y se ha situado en el centro del programa Competencias Transversales, que pretende que los estudiantes interactúen directamente en su entorno más inmediato aportando sus conocimientos en beneficio de todos. El objetivo es que sean conscientes, a partir de experiencias prácticas y de intervención directa, que la función educativa va más allá de las aulas y que su aportación puede contribuir a mejorar la sociedad. Así pues, este curso, el trabajo sobre los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) y la competencia lectora han marcado este programa, que hace trabajar de forma conjunta a estudiantes de primer, segundo y tercer curso del grado.
El “Atrapallibres” y el descubrimiento del placer de la lectura
La más visible de todas las acciones ha sido la participación directa de los estudiantes del grado en el proyecto Atrapallibres (Atrapalibros). Su implicación se ha concretado en el acompañamiento y tutela de niños y niñas en la lectura de las obras seleccionadas para el Premio que impulsa el Consejo Catalán del Libro Infantil y Juvenil con el objetivo de promover entre niños y jóvenes la lectura en lengua catalana, actual y de calidad. El Atrapallibres incluye una selección de tres libros para cada categoría (9, 10 y 11 años) y los niños y niñas se convierten en el jurado que elige cuál es el mejor según su criterio. Para Sílvia Mas Sañé, vicerrectora del Campus Manresa de la UVic-UCC y coordinadora de la Comisión Aloy, «la experiencia de acompañar a un niño en la lectura durante unos meses ha sido muy enriquecedora y gratificante porque les ha permitido, por un lado, tomar conciencia del poder transformador de la lectura en niños que descubren la magia de la literatura, y por otro, desarrollar una serie de estrategias y competencias muy aplicadas que serán fundamentales en su rol de maestros».
Las valoraciones que han realizado los estudiantes de esta experiencia también van en esta línea. Paula Escalera Martín y Kai Suñol aseguran que participar en el Atrapallibres “nos ha dado la oportunidad de poder acercarnos al niño y de crear vínculos entre ellos y la lectura. Esta experiencia nos irá muy bien cuando seamos maestros, porque ya habremos cogido algo de práctica en este aspecto”. Laura Martín y Carla Cocera añaden que «el momento más gratificante ha sido ver cómo el niño estaba disfrutando realmente de la lectura de cada uno de los cuentos y cómo, a medida que avanzaban las historias, se adentraba un poco más en el mundo lector. A través de este proyecto no solo hemos descubierto la importancia que tiene la lectura desde pequeños sino también hasta qué punto es una herramienta para desarrollar la conexión emocional, la autoestima, la imaginación y creatividad, el desarrollo cognitivo y el lenguaje».
«A través de Atrapallibres, hemos descubierto, no solo la importancia que tiene la lectura desde pequeños, sino también que es una herramienta para desarrollar la conexión emocional, la autoestima, la imaginación y creatividad, el desarrollo cognitivo y el lenguaje»
A partir de esta primera experiencia con el Atrapallibres y, teniendo en cuenta tanto la valoración que se hace desde los estudios como por parte del estudiantado, se ha decidido que la vinculación entre el grado en Maestro de Educación Infantil y el proyecto tendrá continuidad el próximo curso, con una intervención más larga y con más sesiones de acompañamiento y valoración con los estudiantes.
Aprender a leer distintos registros
En el marco del desarrollo de la competencia lectora de los futuros maestros, también se han puesto en marcha los Círculos de Lectura Académica. Según Sílvia Mas, esta actividad forma parte de la voluntad de hacer que los estudiantes aprendan a leer diferentes registros, desde la ficción hasta el ensayo o los artículos académicos. «Es fundamental que los futuros maestros salgan muy bien formados en este ámbito, no solo porque tendrán que ejercer la docencia, sino también porque esto contribuye a su conocimiento», señala.
Dirigida por la docente Irene Tort, esta es una actividad que sigue una metodología práctica de aprendizaje colaborativo. Consiste en que cada estudiante haga la lectura activa de un artículo académico que comparte con un grupo. Dentro de este grupo cada persona asume un rol diferente con el objetivo de que existan lecturas desde perspectivas diversas. De esta forma, la lectura se puede hacer desde el papel del moderador, desde la voluntad de resumir el documento, desde el papel de hacer preguntas o asumiendo la responsabilidad de escoger elementos contextuales del texto para explicarlos y relacionarlos. El trabajo culmina con una sesión de debate de tres cuartos de hora en la que cada uno interviene poniendo el énfasis en el papel que le corresponde.
La importancia de la oralidad
Según los expertos, en el aprendizaje de la lectura, la oralidad juega un papel trascendental. Por eso la formación del grado incluye talleres de lectura en voz alta, con el objetivo de que los futuros maestros dominen la lectura oral para convertirse en buenos modelos para su alumnado. Una persona que no sea un buen modelo de lectura «difícilmente puede animar a los niños y niñas a leer». Este trabajo se ha desarrollado en dos sesiones que han corrido a cargo de la experta Marta Luna. La primera se ha centrado en los elementos esenciales de la lectura en voz alta, mientras que en la segunda, mucho más práctica, los estudiantes han tenido que preparar un texto para leerlo ante sus compañeros siguiendo las recomendaciones de la docente.
Una jornada práctica para maestros y futuros maestros para animar a los niños en la lectura
La oralidad fue uno de los aspectos destacados de las Jornadas de Educación sobre “El poder transformador de la lectura: el valor de la literatura infantil y juvenil” que tuvo lugar en UManresa el pasado mes de marzo en el marco de las diferentes acciones para impulsar la lectura. En ellas participaron un centenar de personas, la mayoría docentes, pero también estudiantes de Maestro de Educación Infantil. De hecho, eran unas jornadas dirigida a ambos colectivos, con el objetivo de reflexionar sobre la lectura infantil y juvenil, y dar herramientas prácticas para aplicarlas en el aula.
Las jornadas contaron con la participación de las principales referentes de la literatura infantil y juvenil del país, entre las que se encontraban Marta Luna, maestra y experta en la lectura, y Maite Carranza, escritora y guionista, que pronunciaron la conferencia titulada “La pasión por la lectura se contagia”. Una conferencia que fue toda una lección de cómo hacer posible que los niños se sientan atraídos por la lectura.
La lectura es la base del aprendizaje, pero algunas escuelas quieren ir demasiado rápido para introducirla entre los niños. Antes de llegar, es necesario empezar por la oralidad, que es la que nos llevará a la lectura. Coincidieron en decir que es importante que los niños desarrollen el lenguaje gracias a un entorno donde las palabras fluyan, que adquieran la capacidad de escuchar y entender, y que posteriormente aprendan a hablar y crear estructuras lingüísticas. Este es el camino que llevará a los niños a tener interés por leer y, finalmente, en último término, por escribir.
La lectura es la base del aprendizaje, pero algunas escuelas quieren ir demasiado rápido para introducirla entre los niños. Antes de llegar, es necesario empezar por la oralidad, que es la que nos llevará a la lectura
Recetas para que los niños queden atrapados en la lectura
Que los niños tengan interés por la lectura requiere que se enamoren de las palabras, pero también prestigiar el libro como objeto. Lo segundo implica evitar que los niños asocien los libros al trabajo que se les encarga en la escuela y que los vuelvan a ver como objetos deseables, que fomenten el placer, el descubrimiento y la curiosidad. Y todo esto requiere docentes comprometidos, que sepan contagiar el entusiasmo por la lectura. Es en este aspecto que es primordial formar a los maestros para que se conviertan en buenos modelos de lectura, para que sepan leer y contar cuentos. Solo así se evitará que en las escuelas se acabe enseñando la mecánica de la lectura sin tener en cuenta la expresión que da sentido a las estructuras gramaticales que los niños tendrán que saber llevar a la práctica cuando tengan que leer o escribir.
Otro de los aspectos clave en el fomento de la lectura entre los niños pasa por la prescripción lectora, y esto también implica que los maestros y futuros maestros lean mucho para realizar buenas recomendaciones. Solo de esta forma, desde esta experiencia lectora, se conseguirá que la selección de las lecturas sea la adecuada a la edad de los niños y jóvenes, evitando así que se frustren si no entienden el texto que están leyendo.
Otras acciones
No todas las acciones que se han llevado a cabo durante el curso han tenido la dimensión del Atrapallibres, pero sí que, en todos los casos, se han sumado al objetivo de contribuir a mejorar la relación de los estudiantes con la lectura teniendo en cuenta el papel que deberán desempeñar en el futuro como promotores de la lectura. Este es el caso del taller de tertulia literaria infantil que impartieron dos docentes expertas, Mariona Pujol y Maria Graell, que dieron herramientas a los futuros maestros para trabajar la conversación y el diálogo en el aula con los niños después de una lectura literaria.
Otra de las iniciativas a las que se dará continuidad es precisamente la que han impulsado un grupo de estudiantes que ha estado trabajando en un proyecto de dinamización de la biblioteca pedagógica de los estudios de educación. Esta iniciativa, enmarcada en las competencias transversales y relacionada con el ODS “Educación de calidad”, se ha concretado en lo que se llama el ULlegim, un escaparate ubicado en un lugar visible del edificio FUB4, junto a las estanterías de libros, donde periódicamente se destaca y se propone la lectura de algún título relacionado con el mundo de la educación o de interés para maestros y futuros maestros.
Paralelamente, los estudios participan activamente y hacen participar a los estudiantes de Maestro de Educación Infantil en actos y actividades relacionados con la lectura, como el festival Tocats de Lletra o el Día de la Poesía.
La ventaja de disponer del Centro de Documentación en Literatura Infantil y Juvenil Josep Maria Aloy
Muchas de estas actividades tienen como escenario el Centro de Documentación en Literatura Infantil y Juvenil Josep Maria Aloy, un espacio que aporta gran valor a los estudios de educación de la Facultad. Según la vicerrectora del Campus y coordinadora del Centro de Documentación, Sílvia Mas, disponer del centro hace que «los estudiantes tengan acceso a un fondo documental único con más de 8.000 libros de literatura infantil y juvenil en lengua catalana, además de archivos y material para realizar estudios e investigación en este ámbito». Además, añade, «el Centro Aloy se ha convertido en un espacio dinamizador de actos culturales relacionados con la promoción de la lectura, como presentaciones de libros, espectáculos literarios y debates, entre otros». Además, la Comisión que gestiona el Centro Aloy está configurada por personas expertas en la lectura y la literatura infantil y juvenil «que son generadoras de ideas, proyectos y actividades que impactan en los estudiantes de educación de la Facultad y que favorecen su formación en este ámbito». Por todo ello, «el Centro es, sin lugar a dudas, un catalizador para la formación de la competencia lectora de nuestros estudiantes».
Disponer del Centro de Documentación en Literatura Infantil y Juvenil Josep Maria Aloy hace que los estudiantes tengan acceso a un fondo documental único con más de 8.000 libros de literatura infantil y juvenil en lengua catalana, además de archivos y material para realizar estudios e investigación en este ámbito
La lectura en los estudios de ciencias sociales de UManresa
La lectura es transversal en todos los estudios que se imparten en la Facultad de Ciencias Sociales de Manresa. Además del grado en Maestro de Educación Infantil, esta es una cuestión que también se trabaja en los grados en Administración y Dirección de Empresas y en el grado en Gestión de la Sociedad Digital. Según el decano de la Facultad, Marc Bernadich, «la lectura es la base sobre la que podemos construir conocimiento». Leer y debatir forma parte del día a día de los estudiantes porque leer y después reflexionar y debatir sobre lo que leemos permite desarrollar el espíritu crítico y es una forma diferente de adquirir conocimientos.